miércoles, 1 de noviembre de 2017

“La mejor arma es la imaginación del público”

Criss Angel, el reconocido mago  ilusionista  lleva al escenario su tétrico show de TV “MINDFREAK”.

Ornella Grosso

Cerca de las 20.30 del 14 de septiembre los espectadores comenzaron a llegar al teatro del hotel Luxor, en Las Vegas, Estados Unidos. Criss Angel deleitaría a todos con el último show de la temporada en esta ciudad para comenzar con su gira internacional.
Luego de una breve presentación por parte de dos cómicos pertenecientes al staff, repleta de trucos fallidos y parodias a los realizados por Criss Angel, alrededor de las 21 el teatro quedo completamente a oscuras dando por iniciada la verdadera función.
Criss Angel junto con sus colaboradoras
El reconocido mago comenzó dirigiéndose al público explicando cuestiones técnicas vinculadas a los trucos que llevaría adelante y resaltando que su único objetivo “es volarle la cabeza al público”. Desde el comienzo del show hasta el fin del mismo estuvo completamente inmerso en una actitud sombría y terrorífica que tanto lo caracteriza.
El teatro se mantuvo toda la función completamente a oscuras, salvo en los momentos en que el mago permitía una luz tenue para aumentar la intriga del público que en ningún momento pudo ocultar su euforia. El comienzo del show se caracterizó por los trucos más usuales que uno puede ver en la mayoría de sus presentaciones, desde partir en dos a una de sus ayudantes hasta lograr salir de un chaleco de fuerza completamente cerrado colgadando desde el techo.
El ilusionista luego de salir de un chaleco de fuerza
Entre los momentos de máxima expectativa y exaltación por parte del público se destacó la desaparición de su motocicleta y posterior aparición en medio de uno de los pasillos del teatro y su salida de una caja completamente cubierta por cemento.  En todo momento los espectadores se encontraron atentos buscando encontrar algún error, pero como dijo el mismísimo mago: “La imaginación del público y la extrema creatividad de mi staff y técnicos, lo es todo”.

Luego de una hora y media repleta de trucos, magia, ilusionismo, y emociones encontradas, Criss Angel finalizó el show invitando a los presentes a donar a su asociación (su pequeño hijo posee esta enfermedad). El público lo despidió con una enorme ovación, deseando que vuelva. 

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